A veces, la belleza me hiere; la emoción me paraliza.Siento laxitud en mis miembros, creyendo morir bajo sus pies.
Son instantes que se refugian en mi retina, quemándola hasta rozar la ceguera, anestesiando mi mirada.
Por eso, siento toques de esgrima en mi corazón; me cuesta detener los golpes de espada que me asesta, que acomete de nuevo sin querer.
No sé si resistiré tanta Belleza.
ResponderEliminar¡Qué imagen más certera la de las punzadas, los pellizcos en el corazón!
La verdad es que es una apreciación tan subjetiva…
Lo que para unos es bello, para otros es ordinario y vulgar.
La belleza que te pinche tiene que estar en sintonía con tu sensibilidad. Debe vibrar en la misma longitud de onda que tu alma. Cuando se da una correspondencia completa entre el “objeto de belleza”, y tus canales sensoriales de apreciación de la misma.
Me gusta leer estos relatillos en estos días tan grises.
ResponderEliminarBesotes Granainos.
Papi que te repongas pronto y bien.
ResponderEliminarA la Mami que se cuide y besos.
Bueno, y en esta situación... ¿quien da mimos a quien?